Universidad del Atlántico
Facultad de ciencias económicas
Administración de empresas
Presentado por: Valentina Paola Arrieta Pérez
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La educación: ¿sacrificio u
oportunidad?
“La
educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo”
Nelson
Mandela
La
educación es el pilar fundamental para el desarrollo del ser humano, es esencial
para aumentar la calidad de vida. Pero, ¿será que la falta de educación es lo
que hace que Colombia sea un país subdesarrollado y con altos niveles de
pobreza? En respuesta, la falta de educación no es el único problema, sino el interés,
la motivación y la creatividad del individuo para la invención, el
atrevimiento, el descubrimiento, la travesía y la explotación de ideas. Como
dice Paulo Freire, hay que redibujar, repensar, reconstruir, rediseñar el mundo
en que vivimos y contribuir al avance y evolución del mismo. Pero todo, con
base en la educación.
Yo
estudio administración de empresas y pienso que con ella puedo redibujar el
mundo. La administración es fuente de creación y oportunidades, con ella se
gestiona, se crea, se direcciona una empresa y todo buscando satisfacer las
necesidades de la sociedad. Cuando la sociedad está satisfecha, el mundo está
satisfecho y por tanto se propicia su desarrollo.
Pero,
no se trata de mirar sólo el campo administrativo, se trata de ver la
influencia de la educación en cada dimensión del ser humano y en la construcción
de una mejor sociedad. Esto se logra a través del reconocimiento del talento
humano y de las necesidades de los demás. Cuando somos capaces de reconocer las
virtudes y fortalezas del otro, podemos convivir, socializar y reconocer a cada
individuo como persona.
William
Allín, establece que “la educación no es la respuesta a la pregunta, la educación
es el medio para encontrar la respuesta a todas las preguntas”, y tiene toda la
razón al afirmarlo, porque la educación es la fuente de agua de la que todos
debemos beber para transformar el mundo, para crecer en todas las dimensiones: física,
espiritual, cognitiva, entre otras.
Lo
importante de educarse es tener vocación y pasión por lo que se hace. En
Colombia, la educación solo cumple la función de reducir la pobreza, de escalar
y lograr un reconocimiento; pero la educación va más allá de eso, la educación es
vida, es transformación, es cambio.
La
Constitución Política de Colombia (1991), en su Artículo 67 plantea “La
educación es un derecho de la persona y un servicio público que tiene una
función social; con ella se busca el acceso al conocimiento, a la ciencia, a la
técnica, y a los demás bienes y valores de la cultura.” Así, se puede ver que
la educación es un derecho, que hace parte del ser humano, del desarrollo de su
persona y potencialidades y con ella se logran derribar las barreras y
fronteras del mundo y generar cambio y armonía.
La
educación requiere sacrificios, porque es un constante devenir de obstáculos,
metas, sueños y barreras. Pero más que
estereotiparla como un sacrificio, debe ser tomada como una oportunidad, puesto
que comenzamos a tener un control total en nuestra evolución y desarrollo como
personas, podemos aumentar las posibilidades laborales en un futuro y pasamos
una de las mejores etapas de nuestra vida en los centros institucionales o
universidades, pues desarrollamos habilidades, fortalezas, conocemos nuestras
debilidades y tratamos de mejorarlas, adquirimos virtudes y crecemos como
personas.
A
manera de conclusión, estudiar una carrera universitaria es una experiencia
enriquecedora, que motiva la reconstrucción del mundo. La educación es una oportunidad
para transformar, siempre tendrá una influencia en la formación integral del
educando, nos permitirá adquirir experiencias y anécdotas que nos ayudarán a
repensar el mundo y a buscar la forma de contribuir a la creación de conciencia
frente a las situaciones de la vida diaria.
Pregúntate:
¿Qué piensas de la educación?, ¿la educación es fuente de cambio?, ¿cuál crees
que es tu propósito en el mundo?, ¿cómo contribuyes a la trasformación de la
sociedad?